<<…dijo Dios… Y hubo… dijo Dios… Y así fue… dijo Dios… Y Dios creó… dijo Dios… Y así fue>>
Génesis 1:3-30 NBLA
Dios es preeminente en Su poder, en Su autoridad, en Su inteligencia. Sobrepasa todo ser y no hay nadie que lo iguale. Lo vemos desde la creación. Simplemente, al pronunciar Su Palabra, las cosas fueron creadas, <<…dijo Dios… Y hubo… dijo Dios… Y así fue…>>. Siempre de acuerdo a Su plan y siempre de acuerdo a Su voluntad.
Soy creación de Dios y me hizo con la capacidad de honrar Su voluntad, pero al mismo tiempo, puedo deshonrar Su persona por mi desobediencia. Al ver Su voluntad plasmada en la creación, quiero que se refleje en mi propia vida. El resultado siempre fue bueno y así ha sido en mi vida también.
Señor, mi Creador, quiero honrarte dándote la confianza y obediencia que mereces. Que al hacerme saber Tu voluntad, sea hecha en mí, así como en los cielos. Y que de mí, también se escriba: “Y así fue… Y Dios vio que era bueno”.
