<<El SEÑOR Dios tomó al hombre y lo puso en el huerto del Edén para que lo cultivara y lo cuidara>>
Génesis 2:15 NBLA
Dios no solamente creó al hombre especial, sino que también le dio algo especial para hacer, un propósito.
Desde la creación, Dios pensó en un trabajo especial para nosotros. Hoy en día, aunque los detalles son diferentes para cada persona, Él sigue dándonos un trabajo para alcanzar Sus propósitos y Su gloria.
Señor, quiero abrazar Tus planes para mí y el trabajo que me has dado. Ayúdame a glorificarte siendo diligente y fiel, así como crecer en mi creatividad y productividad. Quiero trabajar para honrarte y no para que los demás piensen bien de mí. Ayúdame a tener un corazón sincero y que mis motivaciones sean puras.