<<…Él no está allí… no lo puedo percibir… no lo distingo… no lo veo. Pero Él sabe el camino que tomo; cuando me haya probado, saldré como el oro.>>
Job 23:8-10 NBLA
Lectura: Job 22-24
Job no veía a Dios obrando y para él no tenía sentido todo lo que le estaba pasando, pero Job estaba convencido de que Dios si veía a él. Eso le daba la confianza que la prueba que estaba pasando le purificaría como el oro.
Cuantas veces he escuchado o aún experimentado una prueba personalmente y aunque conozco que Dios es Todopoderoso, Justo, Amoroso, Bueno y Soberano, no alcanzo a ver Su mano obrando por ningún lado, no escucho Su voz y no entiendo que pasa. Pero lo más importante en estos momentos no es que yo lo entiendo o lo que yo pudiera ver de su propósito, más bien, lo importante es que Dios sí lo sabe. Esta es mi esperanza en la prueba. Confiando que Dios sabe lo que está haciendo, se que el resultado no puede ser otra cosa que oro precioso en Sus manos.
Señor, a veces no entiendo como estás construyendo mi vida, maniobrando todo para mi bien y Tu gloria. Pero me consuela y me fortalece saber que Tú sabes todo y que tienes todo bajo Tu control. Ayúdame a estar firme en medio de circunstancias incómodas y dolorosas.