<< …he atesorado las palabras de Su boca más que mi comida.>>
Job 23:12b NBLA
Lectura: Job 22-24
Job valoraba más las palabras de Dios que la comida de su plato.
La comida es necesaria. Nutre el cuerpo y sin ella volvemos débiles. A veces el hambre es un factor cuando impacientamos o nos frustramos. Sabiendo lo importante que era la comida para sostener su vida, Job entendía que para una verdadera vida las palabras de Dios le eran aún más esencial.
No es cuestión de comer o no comer. Más bien es entender el valor y lo necesario que son para a cada uno la palabra que le da el Señor. En el orden de prioridades en nuestra vida, Dios debe estar en primer lugar. Sé lo tanto que he amado y anhelado una comida de buen sabor para disfrutar, así y más quiero amar y anhelar a Dios y Sus palabras de vida.
Señor, quiero amarte más a cada día, anhelarte y a atesorarte más que las otras cosas necesarias en mi vida. No quiero pensar que mi día fuera posible sin Ti. Ayúdame a priorizarte en mi mente, corazón, tiempo, finanzas, relaciones y todo. Guárdame en Tu camino.